El Ser, el cuerpo y la infancia

02.03.2023


Biografía corporal consciente

 No hay en mi memoria recuerdos conscientes de la infancia donde cobrase especial importancia mi conciencia corporal. Me recuerdo totalmente entregada al momento con una atención indivisa entre mi mente y mi cuerpo. Jugar siendo el juego, moviéndome siendo el movimiento.
En los primeros años de la vida el niño/a está inmerso en su Ser como pez en el agua. El entorno madre-padre le envuelve permitiéndole el despliege natural de su Ser plenamente corporal. Vive su Ser indiviso y ello construye unos cimientos saludables para su desarrollo humano.
Su cuerpo guardará memoria inconsciente de ello y la certeza vivencial de su unidad fundamental siempre le acompañará.
En el momento adecuado la maduración permite incorporar los aprendizajes cognitivos sin que se creen fisuras con el propio cuerpo.
Pero si por distintas razones este "tiempo-espacio" simplemente para Ser, se ve afectado y prematuramente el niño/a pierde su posibilidad de crecer sin tensiones, su cuerpo reflejará esta perdida y la unidad psico-corporal se desarrollará con dificultades.
Los sistemas educativos diseñados por adultos que crecieron con estas fisuras en su infancia, reflejarán esta falta de confianza en la naturalidad del crecimiento y del aprendizaje. Padres o maestros que no cuenten con esa confianza profunda impondrán su visión del mundo, sus ritmos, sus normas...Muy pronto el pequeño/a aprende a someterse, a imitar, a limitarse, a reprimirse , a manipularse... y su cuerpo será un buen escenario para ello.
Pero la fuerza esencial de la Vida misma de la que somos hijos privilegiados, nos confiere a los seres humanos la capacidad a través de la Conciencia de volver al encuentro de nuestro Ser, que en el fondo de nosotros puja por volver a hacerse presente y ocupar el lugar que le corresponde.
Durante ya muchos, años lo he comprobado en mi trabajo como terapeuta psico-corporal con adultos. 
Sigo siendo testigo de la liberación del cuerpo de mis pacientes de sus memorias opresivas de sufrimiento afectivo y de como emerge su Ser intacto.  Este fondo que no se perdió sino que se ocultó bajo capas de tensión y desconexión.